El pícher correlón

Dicen que el miedo no anda en burro y aquí tenemos un claro ejemplo de cómo este pícher de rasgos asiáticos ve como se deja venir el bateador hacia él, lo cual da por entendido que va tres de él, pero noooo, va a cobrar la base por bola, pero que susto uff, después hasta el mismo se ríe de su cobardía