
En principio, el «cruce» entre un pequeño helicóptero y un coche de tres ruedas no estará disponible para compradores privados. «El uso de los coches voladores estará limitado a servicios de auxilio», dijo un portavoz del Ministerio de Transporte.
Para su uso extendido las autoridades tendrían que modificar las leyes generales de circulación.

