Una adolescente de 17 años tiene sorprendida a toda la comunidad médica del mundo por su insólito caso de ser una joven con el cuerpo y el comportamiento de una niña, según publica ‘Times On Line’. El caso de Brooke Greenberg es único en el mundo. A sus 17 años tiene un cuerpo de niña de uno: pesa siete kilos y mide 75 centímetros. Su familia todavía le cambia los pañales, Brooke mantiene sus dientes de leche y nunca ha aprendido a hablar.
En esta fotografía vemos a Brooke (la de la izquierda) acompañada por su hermana ‘pequeña’, Carly, de 13 años.
Por ahora los médicos no encuentran explicación alguna para este desorden, pero un estudio preliminar del ADN de Brooke revela que podría tener un defecto en los genes que le causara esta rareza médica. De confirmarse la conclusión del estudio podría abrir una puerta a conocer cómo envejecemos e investigar terapias para combatir enfermedades relacionadas con la vejez.
Un grupo de los mejores investigadores médicos del mundo se reunirán próximamente en Londres para dar una conferencia en la Royal Society y tratarán este insólito caso. Por el momento, el facultativo que encabeza la investigación es Richard Walker, un profesor de la Facultad de Medicina de la Universidad de Florida del Sur. Estudiar su caso «posiblemente podría darnos la oportunidad de responder a la pregunta de por qué somos mortales», asegura el médico.