Increíble, se trata de una especie de montaña rusa instalada en las montañas de Mieders, Austria, un descenso solo apto para los más atrevidos, alcanzando velocidades de vértigo, sentado en un pequeño cochecito con una palanca de freno. En el caso del vídeo, el protagonista baja sin dicho freno por lo que la velocidad que alcanzando en algunas zonas es vertiginosa.